AGENCIAS. Cruz Azul recuperó la memoria y funcionó como Máquina para devolver a la realidad al Toluca al que le quitó lo invicto y el paso perfecto al golearlo 4-0. Con este marcador, los cementeros llegaron a siete puntos, en tanto que los Diablos se quedaron con nueve.
A los cinco minutos Cruz Azul ya había finiquitado el partido, gracias, sobre todo, a los errores de la zaga de Toluca, pero esto no le quita mérito a los cementeros que parece que han regresado, han recobrado la memoria, y vuelven a posicionarse como uno de los cuadros a seguir en el torneo.
Juan Reynoso mandó a la cancha a un cuadro, podría llamarse alternativo. Dejó fuera a gente como Pablo Aguilar, Luis Romo y Jonathan Rodríguez, la que podría llamarse su estructura, pero nadie los extrañó, nadie pidió su vuelta, porque Cruz Azul actúa, o trata de actuar de la misma forma, esté quien esté en la cancha y ese cuadro “alternativo” fue suficiente para devolver a su realidad a los Diablos, que llegaron al Azteca invictos y con paso perfecto…, lo que les valió de nada.
Bryan Angulo, en una gran jugada que se armó desde el área de Sebastián Jurado, abrió el marcador con gol de vestidor, (3’) y Santiago Giménez enseguida, aprovechó un choque entre el portero Luis García y Orbelín Pineda para desde fuera del área, con el arco abandonado, marcar el 2-0 (5’).
¿Toluca se dio por vencido? No. El Diablo intentó reaccionar, y Cruz Azul, al que le gusta sufrir, aceptó que se apropiaran de su espacio, pero ni así le hicieron daño… Un error de Barbieri abrió al camino para el tercer tanto, segundo de la noche de Angulo (34’).
Para acabarla, Haret Ortega se fue expulsado, ganándose dos tarjetas en dos minutos (38’).
A Reynoso le dio tiempo de meter a su arsenal más pesado, para ampliar la masacre. Después de varias fallas y atajadas de Saldívar, Orbelín culminó otra gran jugada para el cuarto (70’).